Thursday, September 28, 2006

LA TRISTE SITUACIÓN DE NUESTRAS CÁRCELES

En España la situación de las prisiones es preocupante. Tenemos un sistema penitenciario saturado. EL número de población reclusa casi se ha multiplicado por dos desde 1990, cuando las cárceles en nuestro país albergaban 33.035 personas. En la actualidad hay 64.117 presos para solamente haber 38.785 celdas y según Instituciones Penitenciarias habría una sobreocupación del 140%.
Nuestro país es el segundo país de Europa, tras el Reino Unido, con mayor número de personas entre rejas (125 por cada 100.000) en proporción a sus habitantes. Esta cantidad es sólo comparable a la de los años 40, coincidiendo con los años más duros del franquismo.
Las razones del incremento se deben a la supresión de los beneficios carcelarios tras el último cambio del Código Penal, al endurecimiento progresivo de las penas, la lentitud de la Justicia que ha provocado que casi la cuarta parte de los reclusos (unos 15.000) sean preventivos y a la dificultad de los inmigrantes para acceder a la libertad provisional.
En las cárceles se encuentran personas que han cometido todo tipo de delitos, algunos de ellos terribles, pero hemos de recordar que la función de la cárcel es resocializar, y que se ha de tratar a los presos debidamente, es decir como a personas.
Es inconcebible e incluso descabellado, estar conforme con la situación actual de nuestros presos. Se encuentran totalmente hacinados. Esto genera que si una prisión tiene capacidad para 500 personas y tiene el doble, será imposible realizar un tratamiento individualizado. Además, esto provoca un gran descontrol sobre los reos, ya que la masificación en los comedores y patios desencadena que se produzcan peleas cada dos por tres.
Las causas más comunes para acabar en la cárcel, como todos sabemos, son la droga, las crisis familiares, el desarraigo, la soledad, el fanatismo, la marginación, la ambición desmedida, las enfermedades mentales, la ausencia de valores e incluso la pobreza. Pero hemos de ser conscientes de que el sistema penitenciario no puede ser un cajón de sastre para afrontar todos los problemas que la sociedad no es capaz de resolver. La cárcel no puede ser la alternativa a las carencias sociales, la desigualdad, la falta de tratamientos y centros psiquiátricos, la marginalidad, el subdesarrollo, la incultura, la adicción a las drogas...
Por eso, la solución para combatir la delincuencia no es mandar cada vez más gente a la cárcel. No se puede abordar el problema de la seguridad, masificando los centros penitenciarios. Es utópico y sólo se esconde el problema a corto plazo. Si queremos resolverlo a largo plazo hemos de apostar por otras medidas.
Serían medidas alternativas, que se han de potenciar y aumentar para los pequeños delitos, como la realización de trabajos en beneficio de la comunidad y la creación de nuevas unidades terapéuticas para drogodependientes y para enfermos psiquiátricos. Se ha de tener en cuenta que, para muchos expertos, la privación total de libertad es completamente antitética con el tratamiento de determinadas patologías.
Cualquier persona, siendo sensata y no engañándose a sí misma, sabe que con el paso de los años, si no se da la utilización a estas medidas alternativas de cumplimiento de las penas, que las leyes ya contemplan, la situación llegará a ser insostenible. Las prisiones no pueden ser el destino inevitable al que están abocadas todas las personas que incumplen las normas penales. Simplemente no sería realista.
De todas formas, actualmente nuestro gobierno socialista tiene prevista la construcción de nuevas instalaciones penitenciarias. Cada una de ellos valdrá más de 90 millones de euros. Pero también se han de potenciar la creación de centros de semilibertad para que los presos con tercer grado, los que tienen permiso, puedan dejar las cárceles. El sistema penitenciario se ha de modernizar y convertirlo en auténticos espacios donde los reclusos puedan vivir dignamente cumpliendo sus penas. No se puede tratar mal a los presos y no se les puede amontonar. Los presos forman parte de nuestra sociedad y eso no se puede olvidar. Y es que, hay quien dice que el índice de desarrollo de un país se mide en función de cómo se tratan a sus presos y tristemente a nosotros, aún nos queda mucho por hacer.

Thursday, September 21, 2006

SE COGE ANTES A UN MENTIROSO QUE A UN COJO

Estos últimos días el cruce de acusaciones entre socialistas y populares ha vuelto a subir de tono en lo que se refiere a las investigaciones del 11-M. El portavoz del PP volvió, una vez más la semana pasada, a exigir al Gobierno en el Congreso que no se cierren los ya más que investigados sucesos del triste atentado en el que murieron 192 personas.
Siendo los únicos, los peperos, que quieren que así sea, el ministro Alfredo Pérez Rubalcaba respondía que era una inmoralidad cuestionar la labor de jueces y policías, miembros de diferentes cuerpos del Estado, que con clara independencia, transparencia y eficacia ejercen sus funciones.
Pero parece que algunos miembros del PP, no les queda claro que el mismo día del lamentable atentado, en Reino Unido, por citar a un país extranjero, ya decían que había sido Al Qaeda., y que no había vínculo alguno con ETA. Si además después de todo el tiempo transcurrido y las investigaciones realizadas, claras e incuestionables, nos dicen que los asesinos del 11-M murieron o están en la cárcel, como a estas alturas estos señores, pretenden confundir a la ciudadanía de esta manera.
Pues nada, en diversos medios de comunicación están “dale que te pego”, diciendo acusaciones gravísimas. Entre ellas, la posibilidad de haber habido un golpe de Estado encubierto por parte del PSOE para ganar las elecciones.
La verdad, menuda cara más dura tienen. Menos mal que en los últimos días esto se ha tenido que desmentir por altos jerarcas del PP, porque ofendía a cualquier persona razonable y demócrata y además es totalmente falso.
Tan falso que solo cabe en las mentes calenturientas de media docena de periodistas mentirosos y retorcidos que solo pretenden ganar un puñado de votos para su partido político, a costa de jugar con algo tan serio como es un atentado de esa magnitud. Es alucinante como uno puede tener la osadía y la irresponsabilidad de decir este tipo de cosas.
Además Ángel Acebes, encargado de dar explicaciones, teóricamente ciertas y veraces en aquellos tiempos, ni siquiera mencionó la hipótesis del terrorismo islamista. Esto es imperdonable. Antes se empecinaban diciendo que había sido ETA, y ahora dos años y medio más tarde, dan a entender que ETA es posible que haya estado vinculada.
Menudo teatro que le hizo hacer Aznar a Acebes esos días. Le hizo aferrarse a una versión que creía más convincente, con vistas a las inminentes elecciones, pero que les acabó de explotar en la cara.
Sobretodo a Acebes, que no se acordó de una famosa frase que dice: “se coge antes a un mentiroso que a un cojo”, con lo que además de quedar como un títere siguiendo sucias ordenes, contándonos esas falsedades desprestigió toda su trayectoria.
Esperemos que por fin, les entre en la cabeza algo tan simple como que los españoles ya nos pronunciamos sobre lo que sentíamos en este asunto y que ahora lo que tienen que hacer es una verdadera oposición constructiva pensando en el futuro y no aferrándose y mintiendo sobre el pasado.
Y aunque sólo fuera por la intención de querer ganar las próximas elecciones, sin tener en cuenta el aspecto de hacer justicia o de dejar a los muertos en paz, que sería lo deseable, el PP debe dejar de inventarse estas historias, ya que en el caso de que aún fuera verdad su tesis, o sea que el 11-M fue cometido por ETA, policías compinchados, jueces corruptos… lo primero que se debería hacer es reclamar justicia contra el máximo responsable en aquella época, es decir el Ministro del Interior Ángel Acebes.

Tuesday, September 19, 2006

EL HOMBRE DE LAS CHAQUETAS

Érase una vez un niño llamado Federico. Nacido en Orihuela del Tremedal (Teruel) en 1951 e hijo de maestros, estudió bachillerato donde tuvo de profesor, entre otros, al cantautor y político José Antonio Labordeta.
Posteriormente, debido a sus inquietudes literarias decidió trasladarse a Barcelona en 1971, para comenzar su vida universitaria. Curioso la verdad, ya que a las tierras y gentes catalanas siempre las ha maldecido y considerado lo peor de lo peor.
Pero bueno, él no se rindió y continuó sus estudios universitarios para acabar licenciándose en Filología Hispánica y realizar una tesis doctoral.
Él, según dicen en aquella época, un joven comprometido con la sociedad, no dudó en comenzar sus primeras andanzas en el tema de lo político militando en el Partido Comunista.
Con lo que me pregunto yo ¿qué desayunaba este hombre en aquellos años? para pasársele por la cabeza estas ocurrencias, conociendo sus posturas derechistas actuales.
También, durante el franquismo, de forma inexplicable colaboró en revistas de extrema izquierda, lo cual le hace a uno pensar lo centrado que en aquella época estaba. Esto perduro hasta finales de los años setenta donde ya empezó a moderar sus posiciones izquierdistas.

Incluso publicó, y esto no tiene desperdicio, ediciones comentadas sobre los discursos de Manuel Azaña, presidente de la Segunda República, del que fue gran admirador hasta la lectura de los libros de Pío Moa sobre ese período.
Y yo me cuestiono si después de ser partidario de la extrema izquierda a uno le pueden gustar libros de extrema derecha. Esto es una contradicción difícil de asimilar. Más bien diría yo, un sinsentido.

Pues nada, con tantas lecturas que él hacía, decidió también escribir incansablemente, llegando a trabajar en distintas revistas y diarios, como El Viejo Topo, Diwan, ABC, El Mundo, Diario 16, El País, todos ellos de ideología variada y distinta.
Esto es otro de las paradojas de la vida, y es que le quedaron pocos lugares de prensa en los que colaborar. Así que hasta que se dió cuenta de su verdadera postura estuvo dando bandazos de un lado a otro.

Pero es que ni corto ni perezoso, no se le ocurre otra cosa que en 1980 presentarse como candidato, haciendo campaña electoral por el PSA (Partido Socialista Andaluz) de Rojas Marcos en las elecciones Autonómicas de Cataluña. Según él, su objetivo era defender los “maltrechos “derechos culturales y cívicos de todos los españoles inmigrantes que no defienden el PSOE-PSC y el PSC-PSUC por estar influenciados, estos partidos nacionales, por su sector nacionalista. Esto es de risa. No me asombra que solo obtuviera algunas palmaditas en la espalda como diciendo “amigo te has lucido” y un par de escaños totalmente insuficientes para influenciar en el Gobierno de la Generalitat.
Con posterioridad, lamentablemente sufrió un atentado terrorista el 21 de mayo de 1981 reivindicado por el Grupo Terrra Lliure, organización independista ya desaparecida, en el que resultó herido en una pierna por disparo de pistola. Y esto fue el detonante que le hizo ya de una vez por todas, jurar en voz alta y bien alto, “yo, Don Federico, jamás volveré a ser de izquierdas” ( rollo Lo que el viento se llevó).

Actualmente, además de otras cosas, sigue haciendo programas de radio, que es lo que últimamente a él más le divierte. Sobretodo desde que encontró trabajo en la cadena de radio actual en la que está en su salsa.
Pero se ha de puntualizar que el estilo y las formas de Don Federico, en su programa matinal, dejan mucho que desear. Muchos de sus partidarios calificarían sus discursos de satíricos, irónicos y críticos. Pero desde el punto de vista periodístico, cualquier radioyente con un mínimo de sentido común percibe la poca seriedad del programa y su poca veracidad informativa.
Además, como él verdaderamente se regocija trabajando es juntándose con sus amiguitos, afines todos políticamente, para despellejar a diestro y siniestro a todo aquel a quien deciden poner en el punto de mira.
Si a todo esto le unimos la capacidad de invención, exageración y manipulación de este personaje, que no tiene límites, da a uno que pensar, si lo suyo hubiera sido, en vez de dedicarse a la información, hacer películas o cuentos de terror, por su afán de que todo lo que no bendice, este destinado a la destrucción y al caos más absoluto.
También es paradójico el uso extensivo de silencios y preguntas retóricas del que se sirve en su programa, para intentar dar más credibilidad a sus discursos, haciéndose la víctima y endiñando toda desgracia o tragedia a cualquier ciudadano que no sea de sus ideales políticos. Esto genera que todo programa en el que colabora sea un show deprimente y que a uno escuchándole le entren picores.
Tristemente, creo que todavía, nos esperan muchos años de polémicas suscitadas por este personaje tan controvertido. Espero que por gracia divina, como ya hizo al cambiarse la chaqueta del Partido Comunista, al Partido Socialista Andaluz y finalmente al Partido Popular, con el tiempo, le de por otra cosa y deje apartada la política porque ya lleva mucho años, y en estos últimos sobretodo, la cosa ha empezado a oler bastante mal.

Monday, September 18, 2006

EL PSOE Y LA SELECCIÓN DE BÁSQUET ESTAN DESTINADOS A TRIUNFAR

Que alegría nos dio a todos los aficionados del básquet la victoria de la selección española ante Grecia. Dieron un ejemplo de juego limpio, compromiso, esfuerzo, saber hacer, y en definitiva de buena comunicación y de una gran confianza entre todos los jugadores, siendo todos ellos igual de importantes, sin pretensión de ninguno (Pau Gasol) de querer destacar por encima de otros.
Y viendo la trayectoria del PSOE desde que ganó las elecciones, porque no, hacer una semejanza con esta selección española ganadora nada más y nada menos que del oro mundial.
De hecho, en ambas podemos encontrar personas de gran talento dedicadas exclusivamente a lograr el bien común y a intentar aportar lo mejor de ellos. Gente con ilusión, creatividad, optimismo, honestidad, compañerismo participan con gran esperanza y tesón para poder conseguir su objetivo. En el caso del básquet para conseguir ser los mejores jugadores del mundo. Por lo que se refiere a política para que la gente pueda vivir mejor y hacer que los sueños de mucha gente se cumplan. Sueños que en este caso, y por mencionar algunos ejemplos, irían desde mejorar las pensiones, con las que muchas personas no logran llegar a fin de mes, creando hospitales para nuestros enfermos, dignificando barrios que necesitan reformas, equipando las ciudades para nuestros mayores y niños, etc…
Pero también en ambas comunidades existe un sentimiento de equipo en el que el interés personal se supedita al bien común. Todos trabajan con disciplina y constancia con un único objetivo, ser los mejores en sus puestos.
A todo esto se ha de añadir un líder que consiga, y en este caso José Vicente “Pepu” Hernández lo hizo, crear el ambiente sano necesario para que los jugadores sean una piña y en la cancha se pueda percibir alegría, pasión y capacidad de sacrificio.
En el PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, también lo ha logrado llegando a lo más alto, en este caso con el partido político, gobernando con su equipo nuestro país y superando en votos al Partido Popular.
Bueno y ahora en básquet, que se vayan preparando las demás selecciones para las próximas competiciones internacionales porque nuestro equipo pisa fuerte. Y en política el PP, como no da pie con bola, que empiece a preocuparse, aunque dudo que a estas alturas no lo haya hecho ya, porque con la oposición que está desempeñando, por cierto patética y algunas veces hasta miserable, lo tiene complicado. Que tengan suerte porque la van a necesitar, al igual que los equipos de básquet rivales de nuestra selección.

Sunday, September 17, 2006

La desafortunada actuación de Benedicto XVI

El discurso leído por Benedicto XVI ante profesores y estudiantes en la Universidad de Ratisbona, en las que se hacía una mención indirecta a la expansión violenta de la religión de Mahoma, han caldeado todavía más, si cabe, el ambiente en el mundo musulmán.
Joseph Ratzinger mencionó el deplorable diálogo mantenido entre un emperador bizantino Manuel II Paleólogo y un desconocido erudito persa, en el que el emperador dijo:“ muéstreme también aquello que Mahoma ha traído de nuevo y encontrarás solamente cosas malvadas e inhumanas, como su directiva de difundir por medio de la espada la fe que él predicaba”.
Posteriormente, y para intentar salvar los muebles, el director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Federico Lombardi, realizó una declaración en la que destacaba que el Papa se había limitado a efectuar “un rechazo claro y radical de la motivación religiosa de la violencia”. También puntualizó que Benedicto XVI no tenía intención de ofender la sensibilidad de los creyentes musulmanes”, cosa difícil de creer, ya que siendo el máximo responsable de la iglesia católica es bien conocedor de la repercusión de sus discursos.
Desde Pakistán, Indonesia, Irak, Egipto, Marruecos, llovieron críticas y exigencias de “excusas personales”. Y es que no es de extrañar, porque son afirmaciones irresponsables y hostiles al islam y a Mahoma y que generan un precedente peligroso.
Digo esto, porque para muchos, el Papa habló como sus predecesores del Medievo que desencadenaron las cruzadas.
Pero, no solo se han indignado con este desafortunado comentario los países islámicos, sino que también, compañeros del propio Papa y parte de sus fieles piensan que las protestas musulmanes son comprensibles, debido a haber asociado violencia e islam, por cierto olvidando hacer mención a la historia violenta del cristianismo.
Y todo esto conociendo la especial sensibilidad de los seguidores de Mahoma a todo lo que se dice del islam, particularmente si quien lo menciona no pertenece a la fe musulmana.
Por lo que Benedicto XVI ha metido la zarpa hasta el fondo. En vez de mencionar casos de arreglo pacífico de controversias entre religiones o de diálogo entre ellas, con este tipo de comentarios cae bastante bajo.
Cae bajo tanto en el fondo como en la forma. En la forma porque un líder mundial con millones de fieles no puede permitirse hacer esos deleznables comentarios. Y en el fondo, porque remitirse a una cita del siglo XIV totalmente desfasada y claramente dañina es un recurso un tanto cutre.
Reflexionando un poco, no sería de mal pensado, cuestionar si lo mencionado por Ratzinger, tiene que ver con la intención de incluir el tema, del que tanto se discutió, de la elaboración del articulado referente a lo religioso en la Constitución Europea. Da que pensar si debido a la masiva inmigración asiática y musulmana a Europa Occidental haya cierta preocupación en el Vaticano por la expansión del islam en Europa.
Después de lo mencionado, lo más sensato sería que Ratzinger pidiera disculpas y esperar que no suceda un peligroso e innecesario incidente de esta magnitud. Son palabras despreciables que no pueden volver a incendiar el mundo musulmán, como se hizo el pasado invierno con las viñetas de Mahoma y porque el mundo no esta para iniciar crisis internacionales, derivadas tristemente por religiones, entre Occidente y el islam.